
Llegando a Caracas golpe de 6:30pm, logré llegar a tiempo a la UCV y enfilarme en una de las puertas del Aula Magna. Mientras esperaba sentada ya en mi puesto me entretuve viendo el techo y leyendo un pequeño periódico (Semanario ccs).
Pasada las 8:00pm aparecieron los músicos (baterista, bajista, guitarrista y un trío de cuerdas) luego el Charly ubicándose en el centro del escenario entre 4 teclados y un piano de cola. Así dio comienzo...Podés andar en limousine, cortar las flores del jardín. Con licras negras manchadas de rojo, franelilla negra y chaqueta, audífonos, lentes y sudadera.
Seguía el concierto, "Influencia", "Demoliendo hoteles", "Promesas sobre el bidet", "Popotito", "Alicia en el País", “Estamos en la tierra de nadie, pero es mía”, “Los inocentes son los culpables, dice su señoría”, “El Rey de espadas"...
Al comienzo todo chévere, con una mano tocaba uno de los teclado con la otra el piano y a veces usaba los pies para ayudarse.; sino un solitario con su guitarra. Caminó por el público, lanzó una silla en el escenario mientras cantaba "Asesíname" unos cuantos micrófonos también, tocó los teclados de rodillas, bebió Whisky...desapareció un par de veces.
Culpando a las sillas por no servir y enredarse con el cable del micrófono.
Todo un show probablemente planificado para dejarnos al pendiente a ver si desaparecía por completo o no. Lo cierto es que dejó "los dinosaurios" a medias y "Nos siguen pegando abajo" para no volver mas dejando la última canción a medias también "No voy en tren voy en avión" ésta última estuvo precedida por algunos popurrís (bonus track).
Fueron dos horas de disfrute y entretenimiento. Las palabras de la noche que recuerdo mas: "No me merecen..." Igual no esperaba mucha diplomacia de su parte, ya lo conocemos.
No me lo podía perder, valió la pena.